martes, 23 de julio de 2013

Elsa busca tesoros: así es la vida

Madrugada del 23/07/2013
Insomnios de la 01:48 hrs.


Menos de un verano.
Me queda menos de un verano, y ya no quiero estar ni aquí ni en ningún sitio.
Me siento más niña que habiéndolo sido una vez.

Parar, hoy sé que no es de cobardes, forma parte del universo, por eso, la vida tampoco es eterna: ¿acaso el ser humano puede creerse ser inventor del "reciclaje"?

Menos de un verano me queda para comenzar de nuevo o para terminar para siempre.
A final de septiembre comienzo un recorrido que probablemente me tendrá en un éxtasis que va entre la creación y lo salvaje de luchar por permanecer con los ojos abiertos a este mundo.
Había pensado, llegado el momento, cerrar la cuenta, simplemente porque cuando termine el tratamiento, quiero volver con mis ganas y mi nueva vida, e incluso compartir mis momentos y el fruto de lo que vaya acumulando durante esa etapa; pero en el caso de que las cosas no vayan bien, lo que tengo claro es que no quiero una cuenta abierta a mi nombre, y mucho menos dejar la posibilidad de que nadie (así sea mi voluntad) comente o diga lo cacho perraca o lo cachorrita que fui.

Parar, hoy sé que no es de cobardes, forma parte del universo...
Me dijeron que disfrutara de la vida. Que hiciera de este verano el mejor para mi y para los que me rodean; y me siento feliz y orgullosa porque poco he cambiado el orden de mi vida. Amo al límite a quienes me rodean (no necesariamente a los que me aman)
Sí es cierto, que en estos tres últimos meses me he dedicado a hacer cosas que uno acumula como "pendiente", "pendiente", "pendiente"... he actuado en un teatro, he presentado un programa de radio, he vuelto a tocar el piano, he entrado un camino que se olvida del miedo y la timidez. Hacerlo antes no hubiera sido lo mismo. Ahora era el momento.
Me dijeron que disfrutara y así hago: vivo, amo, escribo.

Parar, hoy sé que no es de cobardes, forma parte del universo...
No voy a esperar a septiembre.
No soy famosa. Tampoco lo deseo si eso implica tener que pedir perdón por existir.

No sé si alguno está de acuerdo en que las redes sociales confunden persona con personaje (yo desconozco como es lo segundo) y es por eso por lo que en ocasiones se nos somete al insulto, a la vejación, a la difamación por parte de personas que, si te conocen no debió ser lo suficiente, o que sin conocerte te hacen protagonista de sus miedos personales (sin palabra mediante) por, supongo, la proyección que cada uno tiene frente a los demás. 

Será la obscenidad de un vocabulario metafórico, o porque se fijan más en el largo de una falta para censurar todo lo que tras ello puede ser una mujer (siempre hubo falsos "progres")

No estoy a ese nivel, el precio por compartir lo que hago y escribo a día de hoy es demasiado alto teniendo una sola oportunidad de existencia.
No estoy ya ahí, ni aquí, ni allá, en un momento de mi vida como este, en el que, como dice un amigo, hay que distinguir "lo importante,  DE LO URGENTE" 

Viviré de forma tranquila los próximos meses, con mis amigos, con mi familia, y con los que queráis estar a mi lado a través de la palabra: he sido tan feliz en los últimos meses, las últimas semanas, tan, tan, tan... que este paso, este camino que tengo era totalmente necesario para vivir la intensidad, el límite y la extensión de las cosas. No cambiaría nada, ni siquiera los llantos.

Mis últimas apariciones físicas serán a través de:

- El blog "Un susurro escrito" se seguirán respirando algunos de mis versos, 
- Los lunes del mes de agosto en el 93.7 de RAC MALLORCA de 22:00 a 24:00hrs. seguiré caminando por el mundo poético de la música y el silencio.
- Dos últimas funciones en el teatro (30 de julio y 27 de agosto) 
- Y la presentación del poemario de Lucía Domiguez (Renaciendo en Verso) en Ibiza el 19 de agosto, 




Después, llegará septiembre, lo sé, de verdad que lo sé que...
Parar, hoy sé que no es de cobardes, forma parte del universo...


Volveré, si se me permite.
Y si no, os dejaré "Ensayo para un ser": novela en la que participarán algunos amigos, entre ellos Pedro Andreu quien (creo) se prestará a escribir probablemente el final o un pequeño final para el libro.


Gracias por sentir conmigo y hacerme sentir.
Me lo llevo puesto. 
Sed inmensamente felices.